lunes, 16 de marzo de 2015

Tiempo para "La novia de..."

Cómo pasa el tiempo, el mismo que nos acosa con su velocidad, con su imposición, con la vida misma. Ese tiempo que envuelve las horas en días, que se deshacen en semanas, que nos arropan en meses, los mismos que crecen para hacerse años, tiempo que igual que nace muere.

Nostalgia es pensar en el pasado, ver cómo mi Licenciatura en Periodismo cumplirá un año más, y ya van cinco. Desde hace aproximadamente un año tomé una de las decisiones más duras de mi vida. Para mi el Periodismo, la información, la escritura y la comunicación son aspectos de vital importancia en mi día a día, de echo jamás pensé que sería tan difícil la lucha para poder ejercer, ni tan siquiera en mi pueblo. Quizás voy a ser dura, pero creo que más duros han sido otros, ya que la lacra para todo licenciado en periodismo es el intrusismo. Muchos somos los jóvenes que salimos de la Facultad lo suficientemente preparados como para ejercer y para seguir aprendiendo, porque aunque algunos crean saberlo todo, sólo los que hemos sido instruidos por libros y catedráticos sabemos que un periodista es "un océano de sabiduría con un dedo de profundidad", por eso nunca debemos dejar de aprender. 

Y para colmo, la complicada situación de tener que emigrar de tu ciudad porque no hay sitio más que para intrusos. Es un lugar prohibido, "nadie es profeta en su tierra". ¿Para cuando una Ley que regule la actividad informativa y proteja a los Periodistas?





"Injusto no encontrar tu sitio en el Mundo y sentir que ningunean tu única salida: el blog"





Pero este no es sólo el problema. Además de esto, nos 

encontramos con lo fácil que es "matar al mensajero", pero no a uno cualquiera, no. A aquel que quiere sacar a la luz pública la realidad, o por consiguiente al mismo al que tememos porque deducimos que puede disponer de información de gran importancia en su disco duro. 

Hace un año, fue fácil cerrarme la boca. Cuando uno es un necio, nunca renunciaría a su tarea por nada del mundo. Yo dije adiós de manera temporal al Periodismo, porque es injusto no encontrar tu sitio en el mundo y ver como ningunean tu labor en la única salida que encontramos los jóvenes periodistas, nuestros blogs, como para permitir que sigan jodiéndote haciendo daño a los que más quieres. 

Amo mi "yo periodista", pero más amo a mi "yo privado". No es fácil reconocerlo, pero dejé de ser "la periodista" para convertirme en "la novia de..."


Fotos cedidas por Vicen Muñoz